Pros: muy bonito diseño y calidad de materiales, camas muy cómodas en habitaciones de lujo con mármol y detalles decorativos modernos pero acogedores.
La atención es excelente en cuanto a amabilidad y trato.
La cocina es espectacular, sobrepasó las expectativas, mi esposa es chef y yo tengo toda la vida en la industria de los alimentos y nos encantó. Conocimos al chef Eduardo y muy amable nos explicó su concepto, ingredientes frescos y de calidad de la región. Regresaremos pronto.
La atención de Daniel en recepción muy buena, nos consiguió un excelente guía de nombre Antonio, que sabe un mundo y nos llevó a un recorrido muy bonito en la zona arqueológica de Calakmul y al día siguiente en Balamkú.
Los masajes con Beatriz excelentes, muy profesional y realmente sanadores.
Contras: Falta algo de organización en el personal aún, pero se compensa con actitud, recomiendo no ir con prisas y más bien relajarse, ya que es el sitio ideal para ello rodeado de tanta naturaleza.
A pesar de ser nuevo, tiene ya algunos detalles de mantenimiento, no sirve algún ascensor para ir a la alberca, ni funcionan las máquinas de hielo.
Aún así vale mucho la pena por la experiencia y la relación calidad precio, tanto que regresaremos pronto, ahora solo a relajarnos.